Hace unas semanas Xóchitl Gálvez, aspirante a candidata a la presidencia por la oposición, declaró que ella fue militante de la LOM (Liga Obrera Marxista). Esta declaración se enmarca en la campaña electoral que la oligarquía organiza para disputarle el poder a MORENA en 2024. Recurriendo a un supuesto pasado indígena, popular de izquierda y hasta revolucionario, se busca engañar a una parte del pueblo de México, presentando a Xóchitl Gálvez como una persona que viene de abajo, que a través del esfuerzo pasó de ser una “ingenua militante revolucionaria a una gran empresaria”, lo que es totalmente falso, Xóchitl viene de una familia de dinero. 

Para nosotros militantes de la LCI es una responsabilidad moral desmentir estas declaraciones, nos consideramos herederos de las mejores tradiciones políticas de la LOM y del trotskismo, nuestro grupo representa la continuidad de la lucha de aquellos militantes que fundaron esa organización en México en la perspectiva de la lucha por la transformación revolucionaria de esta sociedad a través del Socialismo.

La LOM fue fundada en 1959, agrupando a juventudes y trabajadores que buscaban una perspectiva revolucionaria en contra del régimen autoritario del PRI, militantes que encontraron en las ideas de León Trotsky y en el método del marxismo las herramientas para describir la realidad y actuar para transformarla.

Ante la represión la actividad de la LOM se desarrolló en la semiclandestinidad siguiendo un modelo organizativo centralista democrático (bolchevique), donde los militantes eran seleccionados después de un proceso de estudio y de acción práctica en la lucha de clases, con la responsabilidad de reunirse cada semana, pagar una cuota y campañas para financiar las actividades del grupo.

En 1988 los militantes del PRT y de la LOM apoyaron la lucha contra el fraude electoral uno de sus dirigentes José Ramón García, fue víctima de la represión estatal, siendo el primer desaparecido del sexenio de Salinas, caso que sigue abierto sin resolverse hasta hoy.

De acuerdo con testimonios de compañeros que militaron a finales de los setentas, Xóchitl Gálvez nunca fue cooptada por la organización, es decir la LOM, no la reconoció como militante, con todas las obligaciones y derechos, ni pasó por el proceso de formación teórica, ni en la praxis.

Los militantes trotskistas que hoy nos agrupamos en la LCI-CORCI, seguimos fieles a la lucha contra el capitalismo, seguimos fieles al programa de la Cuarta Internacional y luchamos por su reconstitución, y continuamos la lucha hacia el socialismo de manera independiente, sin pertenecer o simpatizar con ningún partido político, nosotros no apoyamos ni a MORENA, ni al PAN, ni a MC ni a ningún otro partido.