Editorial de The Organizer, 30 de abril de 2024, publicación de Socialist Organizer, grupo del CORCI en Estados Unidos

El 22 de abril, el Congreso de Estados Unidos aprobó un enorme paquete de ayuda exterior de 95 mil millones de dólares dividido en tres partes: 61 mil millones de dólares para Ucrania, 26 mil millones de dólares para Israel y 8 mil millones de dólares para la región del Indo-Pacífico, con la mayor parte destinada a Taiwán.

Desde noviembre de 2023, debido a la obstrucción de miembros del Congreso vinculados a Donald Trump, la votación sobre este gasto militar adicional estaba bloqueada. Pero 48 horas antes de la votación, Trump declaró que “la defensa de Ucrania es importante para Estados Unidos”, dando luz verde a sus partidarios para poner fin a su obstrucción.

Una vez más, los intereses superiores de la clase capitalista se impusieron a todos sus representantes, tanto demócratas como republicanos.

¿Qué hay en el paquete de 95.000 millones de dólares?

– 61 mil millones de dólares dedicados a la guerra en Ucrania provocada por Estados Unidos y la OTAN. Esto se suma a los cientos de miles de millones que ya han gastado la administración Biden, la Unión Europea y los miembros y países aliados de la OTAN.

Los detalles revelan una historia significativa. Se incluyen: 14 mil millones de dólares para la Iniciativa de Asistencia a la Seguridad de Ucrania, en la que el Pentágono compra sistemas de armas avanzados para el ejército ucraniano directamente de corporaciones estadounidenses para nuevas compras de armas y 8 mil millones de dólares en “asistencia económica” no militar en préstamos condonables.

El Pentágono también recibirá 23.000 millones de dólares para reponer su arsenal ya enviado a Ucrania, lo que abre la puerta a futuras transferencias militares, y otros 11.000 millones de dólares para financiar operaciones militares estadounidenses en la región. [Estados Unidos ha enviado a Ucrania aproximadamente 113 mil millones de dólares desde que las tropas rusas invadieron en febrero de 2022.]

– 26.300 millones de dólares en ayuda relacionada con Israel, incluidos 9.700 millones de dólares en compras de armas por parte de Israel, 6.800 millones de dólares al Pentágono para reponer armas que Estados Unidos ya entregó a Israel y para llevar a cabo operaciones militares estadounidenses en la región resultantes de la guerra genocida de Israel. También se incluyen 9 mil millones de dólares en ayuda humanitaria, que no es más que una gota en el océano para aliviar la hambruna causada por el ataque genocida y el asedio de Israel a Gaza.

Una suma considerable: representa casi ocho veces la asignación básica anual de Estados Unidos al Estado de Israel (alrededor de 3.300 millones de dólares en el presupuesto estadounidense).

– Y más de 8.000 millones de dólares en ayuda militar a Taiwán y para los preparativos de guerra de Estados Unidos contra China, incluidos 3.300 millones de dólares para el desarrollo y la infraestructura de submarinos estadounidenses.

Noventa y cinco mil millones para alimentar los actuales baños de sangre en Gaza y Ucrania y avivar las llamas de una guerra contra China… mientras 37,9 millones de ciudadanos estadounidenses viven por debajo del umbral de pobreza.

No se puede ocultar el hecho de que la mayor parte de este paquete beneficia al ejército estadounidense y a los contratistas de “defensa” del país. Alrededor del 23% permitirá a Ucrania rearmarse mediante la compra de equipos y municiones de la industria de “defensa” estadounidense, y el 38% se destinará a reponer los sistemas de armas y municiones del ejército estadounidense.

¡Esto significa que un enorme porcentaje de las sumas prometidas a Ucrania irá directamente al ejército estadounidense y a su industria bélica! Lo mismo ocurre con las partes de Israel y del Indo-Pacífico.

¡Los miembros del Congreso de DSA votan por la financiación de la guerra para Ucrania!

El 20 de abril, cuando la Cámara de Representantes de Estados Unidos aprobó la asignación de 61 mil millones de dólares para la guerra de Ucrania, las dos congresistas demócratas de DSA, Alexandria Ocasio-Cortez y Cori Bush, votaron sin vacilar a favor.

Socialistas Democráticos de América (DSA) es una organización que se autodenomina “socialista”, aunque es miembro de un partido capitalista, el Partido Demócrata de Biden. Ya el 17 de abril, Ocasio-Cortez había anunciado: “Durante 738 días, Ucrania ha estado luchando contra Putin, una batalla que la democracia global no puede perder. … Es hora de que el Congreso vote sobre la ayuda a Ucrania”.

Cori Bush, por su parte, declaró el 20 de abril: “Me niego a permitir que el pueblo ucraniano sufra, que sea entregado al régimen asesino de Putin…. Voté para apoyar al pueblo ucraniano en su lucha contra la invasión ilegal de Rusia”.

De hecho, lo que hicieron Bush y Ocasio-Cortez fue votar a favor de apoyar las ganancias de Lockheed Martin, Raytheon, Boeing y otros traficantes de armas que cotizan en Wall Street: ganancias obtenidas a costa de los trabajadores en una guerra entre oligarcas y capitalistas rusos y ucranianos. ¡en el que los trabajadores de ambos lados no tienen ningún interés!

Maniobra parlamentaria y bipartidismo

En un juego parlamentario deliberado, la administración Biden había dispuesto que se separaran las votaciones sobre la financiación de la guerra para Ucrania, Israel y Taiwán. Treinta y seis representantes demócratas (incluidos Ocasio-Cortez y Bush) votaron en contra de los 26 mil millones de dólares en ayuda a Netanyahu, bajo la presión del enorme movimiento en todo Estados Unidos que pedía el fin de toda la ayuda estadounidense a Israel.

Pero esto no puso en peligro el resultado de la votación sobre los 61.000 millones de dólares para Ucrania, o los 8.000 millones de dólares para preparativos de guerra contra China, por los que Ocasio-Cortez y Bush votaron a favor. Por su parte, algunos republicanos pro-Trump votaron en contra de los 61.000 millones de dólares para Ucrania, de nuevo sin cambiar el resultado final de la votación.

Esta “ayuda” a Ucrania fue posible gracias a un acuerdo en el Congreso entre demócratas y republicanos. “El resultado de hoy confirma otra cosa que hemos subrayado desde el comienzo de este Congreso. En un gobierno dividido, la única manera de hacer las cosas es el bipartidismo”, dijo el líder de la mayoría del Senado, el demócrata Chuck Schumer, el 23 de abril, antes de agradecer al presidente de la Cámara de Representantes, el republicano Mike Johnson, por hacer avanzar la legislación.

¡Alto a la guerra impulsada por Estados Unidos y la OTAN en Ucrania!

Desde el comienzo de la guerra en Ucrania, Organizador Socialista se ha opuesto resueltamente a la guerra emprendida en interés de los oligarcas y capitalistas en Rusia y Ucrania, así como del imperialismo estadounidense y europeo, sacrificando las vidas de cientos de miles de rusos y ucranianos. trabajadores y jóvenes.

Hacemos un llamado a los lectores de The Organizer : unirse al esfuerzo para poner fin a una carnicería cuyo único objetivo es la búsqueda de ganancias capitalistas. Únase a nosotros para exigir: “

– ¡Dinero para empleos y servicios sociales, no para la guerra!

– “¡Ni un centavo, ni un arma, ni una persona para la guerra en Ucrania, Israel o China!”

– “¡No hay apoyo para los políticos capitalistas!”

– “¡Apoye la campaña LCIP por una política obrera independiente!”