De nuestra corresponsal en New York, Sarah Walker

Segundo empleador más grande en los Estados Unidos con 740.000 empleados y mil centros de distribución, propiedad de Jeff Bezos, la multinacional Amazon obtiene beneficios gigantescos gracias acondiciones operativas que impone a sus proveedores y manipuladores. A pesar de las leyes antisindicales, los trabajadores de varios de estos almacenes han logrado forzar su sindicalización.

Del 19 al 24 de diciembre, cerca de 7.000 trabajadores de varios almacenes se declararon en huelga para forzar la firma de un convenio colectivo acorde con las reivindicaciones.

A continuación reproducimos un reportaje sobre el Piquete en el almacén DBK4 en el distrito Queens de Nueva York, por parte de nuestra corresponsal del diario The Organizer.

Durante las vacaciones de fin de año, los trabajadores de varias plantas de Amazon, afiliados al sindicato Teamsters*, se declararon en huelga ante la negativa de la dirección a negociar con ellos. Las huelgas han comenzado el 19 de diciembre. Participé en el piquete en Queens durante el primer fin de semana de movilización. La repentina caída de las temperaturas no impidió que los miembros del sindicato DBK4 Teamsters protestaran en los lugares de entrega todos los días desde las 6 de la mañana hasta el mediodía, exigiendo que los jefes de Amazon vinieran y se sentaran a la mesa de negociaciones.

Entre sus demandas: un aumento de salarios, una reducción de la carga de trabajo, condiciones laborales más seguras y un aumento de sus beneficios sociales.

La huelga se desarrolló de forma pacífica y en un ambiente de entusiasmo. Pero los huelguistas eran muy conscientes de los riesgos de la violencia. De hecho, agentes del Departamento de Policía de Nueva York (NYPD) estuvieron presentes en masa. Arrestaron a un trabajador y luego impidieron que los demás bloquearan los vehículos de reparto que salían del almacén. Obligaron físicamente a los huelguistas a retroceder cuando bloquearon el tráfico durante demasiado tiempo para su gusto. Los trabajadores en el piquete me dijeron que, por su parte, la dirección de Amazon envió gente a romper una manguera contra incendios en el costado del edificio para inundar a los participantes en el piquete con agua helada.

Recientemente, varios centros logísticos de Amazon votaron abrumadoramente a favor de sindicalizarse, pero hasta ahora ninguno de los sindicatos recién formados ha logrado firmar un convenio colectivo con el empleador. La estrategia de Amazon es, sin duda, intentar intimidar a los trabajadores para que retrasen las negociaciones el mayor tiempo posible con la esperanza de que finalmente desistan. O mientras se espera una futura ley de la administración Trump que limite aún más las posibilidades de demandar a los empleadores por “prácticas desleales”.

Pero los trabajadores no mostraron signos de fatiga: el piquete estaba lleno de energía, y cuando las voces se volvían roncas, se escuchaba música hip-hop a todo volumen y se podía escuchar en todo el vecindario. La huelga terminó en Nochebuena.

Volveremos la próxima semana con nuestros corresponsales sobre los resultados de esta huelga.

22 de diciembre de 2024

*Históricamente, el sindicato Teamsters organiza a los camioneros.