En Barcelona, España, y luego en Italia y en Túnez, cientos de ciudadanos y militantes se embarcaron en decenas de barcos con destino en Gaza para “romper el bloqueo”, “No es normal que simples ciudadanos deban sustituirse a los gobiernos que no hacen nada”, explica una militante en Barcelona, resumiendo el estado de espíritu general de los miles de entusiastas que llegaron a acompañarlos.

   En el puerto de Génova (Italia), el 31 de agosto, 30,000 trabajadores y jóvenes saludaron la salida de los barcos, algunos de ellos habían tomado el lugar de los estibadores de la Unión sindical de base (USB), y en donde uno de los responsables precisó: “Si perdemos el contacto, aunque fuera por veinte minutos con los camaradas de la flotilla, bloquearemos a toda Europa y habrá una huelga general”.

   En Túnez, miles de trabajadores se congregaron para acompañar la salida de los barcos, con el respaldo de la Liga tunecina de los derechos del hombre y del Sindicato de periodistas. Israel ya lo previno: ningún navío podrá entrar a Gaza. El ministro fascistoide Itamar Ben-Gvir calificó sin tardar a los miembros de la flotilla de “terroristas”.

   En Bruselas, Bélgica, el 7 de septiembre, 110,000 manifestantes desfilaron. Después de semanas de tergiversaciones, el gobierno federal belga había evocado vagas “sanciones bajo condiciones” contra Israel, pero la masa de manifestantes “no están satisfechos (…) y desean que Bélgica endurezca aún más su posición con relación a Israel, imponiendo sanciones sin compromisos, y que los miembros de la Unión europea y que la Unión europea misma hagan lo mismo.” Anota Euronews del 7 de septiembre.

   Y es que el rechazo de los gobiernos de tomar la menor medida práctica desemboca en situaciones inconcebibles. En Brasil, en donde el presidente Lula multiplica las declaraciones contra el genocidio… sin romper por lo mismo con las relaciones diplomáticas y comerciales con Israel, un mitin era convocado el 4 y 5 d de septiembre en Santos – el puerto más grande de América Latina – para impedir el envío de cargas de acero a Israel. Responsables electos del Partido Socialismo y libertad y del Partido de los trabajadores – el partido de Lula – depositaron un recurso en justicia para intentar bloquear el cargamento.

   En España, mientras que el cineasta Pedro Almodóvar interpelaba a Pedro Sánchez para que “rompa toda relación diplomática, comercial y otras con el Estado de Israel”, al primer ministro “socialista” le bastó con un “embargo de armas” (de las cuales España proporciona una cantidad insignificante). “Frente a las críticas que reclamaban una ruptura total de relaciones diplomáticas con Israel, en particular en el seno de su coalición gubernamental, (Sánchez) rechazó esta opción, juzgada contraproducente” Nota el medio Maghreb Emergent del 8 de septiembre 2025.

   ¡Deshonra a todos esos gobiernos – aún más a aquellos que se dicen de izquierda – que rechazan romper sus relaciones diplomáticas, militares, económicas, comerciales, culturales y deportivas con un Estado genocida!

D.F.