Texto extraído del Boletín informativo nº 321 Jueves, 9 de octubre de 2025 COMITÉ OBRERO INTERNACIONAL Contra la guerra y la explotación Por la Internacional Obrera

“El movimiento anunciado para el 25 de septiembre tomó dimensiones inesperadas (…) traduciendo un irritación flagrante ante los cortes de electricidad y de agua”, escribe la prensa. Mientras que en la tribuna de las Naciones Unidas en Nueva York el presidente Rajoelina disertaba sobre sus “proyectos de desarrollo”, la población de los barrios desheredados de Antananarivo y de otras ciudades salía a las calles en contra de los cortes de agua y de electricidad, reivindicando “vivir, no sobrevivir” y denunciando: “El estado ha abandonado a su pueblo, sin agua, sin electricidad y sin seguridad.” Las lujosas estancias de los personajes importantes del régimen fueron incendiadas y saqueadas. Y es que el 75% de los 30 millones de habitantes de esta antigua colonia francesa viven bajo el umbral de pobreza. Los servicios públicos han sido devastados por décadas de “reembolso de la deuda externa” por todos los regímenes sucesivos, “socialistas” o “liberales”. Las inmensas riquezas naturales y minerales del país han sido entregadas a las multinacionales. En abril de 2025, Rajoelina había “tranquilizado a los inversionistas” frente a una audiencia de patrones franceses que acompañaban a Macron en visita oficial. Comentando las consecuencias de las penurias de agua potable, hace unos meses en el diario MidiMadagasikara, un militante obrero hacía esta pregunta: “La pregunta que nunca hacen los comentaristas es ¿Qué le hace falta a la población trabajadora para terminar con esta situación? La respuesta se concreta en una sola palabra:
¡organización! ¡Sin partido, sin organización, los trabajadores, los empleados sin ingreso fijo y los abandonados a su suerte no podrán organizar la lucha (…) para sacar a la sociedad del lodazal en el que la burguesía malgache ha hundido a la clase obrera!”
J.A.

