Leído en el nuevo número de Minbar lel´Chaghila (Tribuna de los trabajadores).

A finales de septiembre, nueve estudiantes originarios de regiones lejanas y privados de alojamiento en la ciudad universitaria Moulay-Ismaïl de Rabat se vieron forzados a pasar la noche bajo las estrellas. En octubre, vastas manifestaciones de jóvenes, de desempleados, de trabajadores y de estudiantes protestaron contra el hogra*.

El número de noviembre del mensual Minbar lel´Chaghila (Tribuna de los trabajadores) le da la palabra a aquellos que luchan contra la privatización de las universidades: profesores, sindicalistas y estudiantes. Nawaem, estudiante, presta testimonio en las columnas del periódico de las dificultades para obtener o guardar una beca universitaria, en particular porque “con el aumento de las exigencias – sobre todo para los grados superiores y la investigación científica. algunas familias no están informadas a tiempo de los cambios, lo que priva a los estudiantes de las becas. Hay igualmente alzas en las cuotas de preinscripción en algunas filiales, en particular en las maestrías especializadas y en los doctorados. Esta alza crea una barrera financiera para muchos estudiantes que vienen de medios modestos. (…) Muchos de ellos abandonan sus ambiciones universitarias y sus proyectos de investigación. En efecto, no pueden pagar los gastos o soportar el costo global de los estudios, en particular en las filiales que necesitan un trabajo sobre el terreno. Algunos terminan incluso con considerar abandonar y dejar al país, a falta de medios. Eso conduce a la huida de cerebros y de competencias, o bien en el privado o en la búsqueda de estudios menos caros en el extranjero.”

En cuanto a las condiciones de alojamiento, como lo ha mostrado el ejemplo de los estudiantes de Rabat, “La sobrepoblación, la falta de infraestructuras y de alojamientos universitarios tiene un impacto directo y destructor sobre la calidad del aprendizaje”. Entonces, para Nawaem y sus camaradas: “Nuestros problemas (becas, clases atiborradas, alojamientos insuficientes…) son urgentes. ¡No debemos quedar aislados o resignados: es necesario convertirnos en una fuerza militante! ¡Participen en las actividades estudiantiles serias, inicien las discusiones y propongan ideas para construir nuestro futuro!”

*La humillación, la injusticia.